Polo es un apasionado de las motos y de viajar, a quien una simple conversación con un amigo en un bar le terminó cambiando la vida. Lo que había empezado como una tarde de cervezas en una terraza terminó con una idea que no se le iría de la cabeza: hacer un gran viaje en moto por América… que luego continuó mucho mas allá.
Polo siempre había tenido el sueño de recorrer el mundo, y si era en moto, mejor. De esta manera, unió las dos cosas y se lanzó. Empezó su viaje en Miami (EE. UU.), llegó hasta Inuvik (Canadá) y desde allí recorrió el continente americano para llegar a Ushuaia (Argentina). Después voló a Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y continuó hasta Nairobi (Kenia), donde volvería a tomar un avión con dirección Atenas (Grecia) para, desde allí, volver tranquilamente a Madrid. En total fueron 23 meses viajando durante lo que acampó el 60 % del tiempo. De este viaje regresó con 40 países visitados, más de 120.000 km recorridos, muchos litros de gasolina gastados y un pierna rota.
Polo Arnáiz contó su experiencia el 4 de marzo en el Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla (C/ Sierpes, 65) en las V Jornadas IATI de Grandes Viajes. Suscríbete al canal de Youtube de Mochileros TV y podrás ver todas las charlas gratis en diferido →→→ ¡QUIERO SUSCRIBIRME!
Nombre, apellidos, profesión -conocida 😉 a qué dedicas el tiempo cuando no viajas- y lugar de nacimiento.
Polo Arnáiz, Madrid, mientras no viajo me dedico a transformar y restaurar motos clásicas entre otros proyectos locos :))
¿Qué te llevó a decidir dejar todo atrás para iniciar tu gran viaje?
VIAJAR CON SEGURO... ¿SÍ o NO?
Si vas a viajar por libre, lo mejor que puedes hacer es contratar un buen seguro de viaje. Mi recomendación es que contrates un seguro de Intermundial, la compañía más experta en seguros de viaje, con quien tendrás asistencia médica y todas tus necesidades cubiertas tanto antes de viajar como en destino.
Unas cañas de más con mi buen amigo David y cuando me quise dar cuenta el proyecto estaba marcha… jejeje
«Después del viaje, quizás lo que más ha cambio en mí es la forma de valorar las cosas y darme cuenta de las pocas cosas materiales que se necesitan para ser feliz»
¿Recuerdas tu primer viaje?
Gracias a mis padres he tenido la gran suerte de viajar por todo el mundo junto con mis hermanos, el primer viaje fue en avión y del que tengo recuerdos aunque que no demasiados porque debía ser muy pequeño. Fueron unas vacaciones a Canarias, pero el que más me influyó fue uno que hicimos durante un mes por la costa este de Estados Unidos en una furgoneta a la aventura.
¿Qué ha cambiado en tu yo interior después de este gran viaje?
Después del viaje, quizás lo que más ha cambio en mí es la forma de valorar las cosas y darme cuenta de las pocas cosas materiales que se necesitan para ser feliz.
5 cosas que nunca faltan en tu mochila
– Lo primero de todo una bota de vino de Las Tres ZZZ – Una cámara de fotos para poder guardar recuerdos – Un trípode, si viajas solo es casi la única forma de salir en las fotos cuando no tienes a nadie cerca – Un ordenador para poder comunicarme, informarme y compartir mi viaje
Y en el fondo todas ellas son prescindibles
¿El momento más extremo/peligroso/extraño/paranormal que hayas vivido en tu gran viaje?
El momento más extremo fue cuando tuve una caída tonta de la moto y me rompí la pierna en Chile cerca de la Reserva Biológica de Huilo Huilo. Tarde más de 7 horas en llegar al hospital donde me operaron. Afortunadamente la operación fue un éxito y a día de hoy ni me acuerdo que me rompí la pierna.
¿Algunos momentos que recuerdes de felicidad extrema? Esos puntos álgidos de alegría en los que uno se dice a sí mismo: «Por momentos así merece la pena seguir en el camino”.
Llegar a Inuvik, la ciudad canadiense más al norte accesible por tierra, por encima de Círculo Polar, después de recorrer una carretera de 700 kms de tierra, que cruza una de las zonas mas inhóspitas y remotas del planeta. En ese momento creo que fui consciente de lo que estaba haciendo y la gran suerte que tenía.
«Es verdad que estoy infectado por el virus del viajero pero los próximos viajes que me planteo tienen una duración máxima de 5 meses volviendo siempre a casa para poder apreciar más aún los sitios visitados»
Tres personas anónimas que te hayan marcado en el camino.
Son muchas las personas anónimas que durante el viaje me han acogido, ayudado y empujado a cumplir uno de mis sueños. Pero en especial, Fernando, un español que lleva viviendo en Chile más de 25 años al cual conocí en la calle el día que llegué a Santiago de Chile. Enseguida me invitó a su casa y a conocer a su familia. Ellos cuando tuve el accidente me ayudaron hasta que pude volar a España, además de cuidar de Macarena, mi moto, durante 7 meses hasta que pude volver y retomar de nuevo el viaje.
Una vez uno se embarca en un tipo de vivencia así queda infectado por el virus del viajero. ¿Qué sensaciones has tenido a tu regreso al llegar a los que consideres tu hogar? ¿uno termina convirtiéndose en nómada para el resto de su vida?
La primera sensación es que como en casa, en mi caso Madrid, no se está en ningún lado. Yo no me considero que me haya convertido en un nómada, aunque lo haya sido durante unos años. Es verdad que estoy infectado por el virus del viajero pero los próximos viajes que me planteo tienen una duración máxima de 5 meses volviendo siempre a casa para poder apreciar más los sitios visitados.
Muchos se preguntan… ¿y el amor? ¿cómo es la vida sentimental de los viajeros?
En este caso soy un afortunado, 3 meses antes de salir de viaje conocí a Sandra, amor a primera vista, ella decidió unirse a mi viaje en la etapa desde Seattle a Los Ángeles, pasamos por Las Vegas… ¡y nos casamos! Desde entonces cada 3 o 4 meses me acompañaba unos días allí donde me encontrase, así que he tenido la suerte de poder compartir con ella parte del viaje y a la vez disfrutar de etapas de soledad.
Videoperiodista, documentalista y aventurero. Entre mayo de 2006 y junio de 2007 realicé uno de los grandes viajes de mi vida: la ruta panamericana. De esta aventura nace el documental “La costura de América” que narra este viaje en solitario de 45.000 kilómetros, realizado íntegramente por tierra y más de 11 meses desde Prudhoe Bay (Alaska) hasta Bahía Lapataia en Tierra de Fuego (Argentina). He trabajado como corresponsal de la Agencia EFE en la India y realizado decenas de reportajes sobre turismo, cultura y sociedad para el canal de televisión español Telecinco. En enero de 2014 estuve nominado en los Premios Goya con mi cortometraje documental "La Alfombra Roja" rodado en un slum de India y que lleva acumuladas más de 130 selecciones en festivales de cine de todo el mundo. Sigue mis viajes en mi blog de viajes o mis redes sociales: Twitter, Facebook, Instagram y LinkedIn