Limitaciones inflexibles de equipaje, exiguos espacios, incómodos viajes «tele-venta», penalizaciones desorbitadas. Estas son sólo algunas de las vicisitudes que suponen embarcarse en un vuelo low cost, en donde si nos descuidamos, paradójicamente acabaremos pagando nuestro pasaje a un precio final muy lejos de la oferta que se preveía.
La osadía de volar con una compañía de bajo coste, se convierte en ocasiones, en una de las principales salidas que tenemos en nuestro afán de reducir costes de viaje. Sólo de esta manera, se entiende la aventura e indefensión de someterse a algunos de estos enlatados vuelos, en donde quien más y quien menos, se ha visto emboscado alguna vez por las artimañas de dichas empresas, pasando de una indignación inicial a una resignación obligada que desemboca en algún tipo de pago extra sin remisión.
Bien es cierto, que estas compañías actúan al límite de la legislación y por momentos también de la ética, aprovechando vacíos legales que les permiten sacar el máximo beneficio en cada momento. Pero por mucho que nos lamentamos y por más que su servicio sea mejorable, la existencia de estas líneas aéreas es necesaria. Ahora bien, la pregunta es, ¿existe alguna posibilidad de escapar de las argucias de las low cost?
Trucos y consejos para evitar los costes sorpresa de las low cost
En MochilerosTV pretendemos darte algunos trucos y consejos para intentar minimizar los daños y quebraderos de cabeza de última hora que las compañías de bajo coste nos suelen ocasionar:
1. La impresión de la tarjeta de embarque o boarding pass suele ser uno de los primeros escollos antes de subir al avión. Aquí no valdrán ni olvidos ni excusas para las compañías (tampoco mostrar el e-mail recibido o la foto desde un dispositivo móvil). Llevar una copia impresa es indispensable. La falta de la misma acarreará una penalización de hasta 40 o 50€ que nuestros bolsillos agradecerán ahorrarse al comienzo del viaje.
2. Como es de suponer, el peso del equipaje facturado debe ceñirse siempre a lo establecido por cada compañía. Es recomendable pesarlo en casa, bien sea al modo tradicional, es decir con báscula o en caso de no tener, pedírsela a un vecino o acercarse a la farmacia del barrio, que a buen seguro cuenta con la suya. También se pueden utilizar métodos más modernos como las balanzas manuales o ganchos pesadores de viaje. Si bien esta es la recomendación, hay que decir dos cosas al respecto:
– Conviene dejar algo de espacio libre para evitar la posible descalibración de las básculas de los aeropuertos (no siempre tan exactas).
VIAJAR CON SEGURO... ¿SÍ o NO?
Si vas a viajar por libre, lo mejor que puedes hacer es contratar un buen seguro de viaje. Mi recomendación es que contrates un seguro de Intermundial, la compañía más experta en seguros de viaje, con quien tendrás asistencia médica y todas tus necesidades cubiertas tanto antes de viajar como en destino.
En este post tienes todas las Opiniones sobre el seguro de Intermundial.
Hola! Me ha encantado el artículo, como decís, hay que también ser avispado con las low cost.