La ciudad de Cartagena de Indias encierra historias de piratas, colonos españoles, actividad nocturna y hermosas playas. Ubicada sobre la costa del Mar Caribe, los distintos atractivos que posee la convierten en un sitio que se adapta a lo que busque cualquier turista que la visite.
El principal destino cartagenero es la “Ciudad Amurallada”. Este gran barrio colonial rodeado por un cordón de piedras, data del año 1533. Una gran torre amarillenta con un reloj en su centro nos indica cuál es la entrada. Con sólo cruzar las bóvedas que se abren entre las murallas que divide el pasado del presente, el visitante se sumergirá en un viaje hacia los años de dominio español sobre estas tierras. Calles estrechas, carros tirados a caballo, puertas y balcones de madera y yeso, paseos alumbrados por faroles de luz amarilla, se encuentran por todos lados. Un paseo que seguramente enamorará los ojos de todos los que transiten sus calles.
Alejándonos un poco del centro histórico, se levanta una gran estructura de piedra que años atrás supo ser un fuerte español que servía de defensa de los ataques invasores de piratas, holandeses, franceses e ingleses. Este sitio es el Castillo San Felipe de Barajas. Se puede llegar a él caminando desde el centro y para visitarlo se debe abonar una entrada. Adicionalmente a ella, se ofrece un servicio de guía que se puede adquirir o no. En caso de quererlo, lo ideal es hacerse con un buen grupo de gente para que el costo sea menor ya que ellos cobran lo mismo si el tour lo hace una persona, tres o cinco. También se puede hacer el recorrido de manera independiente.
Isla Barú
El calor que abraza a la ciudad de Cartagena resulta sofocante. Con una temperatura que parece rondar los 40º todos los días, la mejor opción para refrescarse se encuentra a sólo unos pasos del centro histórico. Los balnearios de la ciudad no son muy bonitos a la vista pero permiten alejar al visitante de tanto calor. Sin embargo, la mejor opción de playa se ubica a unos kilómetros de la ciudad, la Isla Barú.
Llegar a ella es muy sencillo. La manera más económica de hacerlo es tomándose un bus desde la estatua de la India Catalina, lugar que se puede ubicar sin problema porque todos lo conocen, con dirección a Pasa Caballos. Una vez allí, hay que hacer un transbordo con otro móvil, que puede ser moto, taxi o una camioneta con cabina detrás, estilo mudanza, hacia el balneario. Todo el trayecto desde la ciudad dura alrededor de dos horas. Lo aconsejable para los visitantes es quedarse a dormir en el lugar ya que existe la opción de acampar en la playa u hospedarse por un módico precio en unas pequeñas cabañas rústicas ubicadas frente al mar.
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